lunes, 3 de abril de 2017

Guadaña Ardiente...

Anoche te volví a soñar
de rodillas ante un ataúd
llorabas muy tristemente
pues ese cadáver eras tu

Luego una mano fuerte
pidió que te levantaras
te llevó hasta la puerta
suspirabas por la muerte

Caminaron por la fría calle
en la magra noche oscura
abandonaron esta escena
al ver que llegaba el cura

Se fueron hacia la esquina
a su quiebre se escucharon
fuertes truenos de invierno
como surgidos del infierno

El eco era estruendo sonoro
que muchos se despertaron
al escuchar en lejanas voces
llantos más quejidos en coro

El cura en pena lamentaba
por sus sensibles oraciones
que en cada rosario rezaba
esperaba un día cambiaras

Una pareja al llegar contó
haber visto a dos personas
que un fuego los encendió
luego el humo se los llevó

La familia no les hizo caso
entendían tenías que volver
a recoger tus incautos pasos
al final...como tenía que ser  




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