Cuando vas por mi calle
tomando dirección Oeste
orientado al gran Océano
caminas hasta el malecón
Girando noventa grados
con dirección izquierda
pasa por allí esa bajada
camino a los pescadores
Alcanzas poco más allá
el inicio de la empinada
la que llena de quiebres
quieta espera para subir
En la planicie del Morro
alta imponente esta Élla
nuestra linda Virgencita
con su Corazón al Cielo
Te espera brazos abiertos
para recibirte con cariño
para rezar por tanta gente
de hogares desamparados
Por tanto niño abandonado
fruto de seres que sin alma
aún deambulan por la vida
muertos de fe y sin sentido
Para que escuche tu voz
hables de tu santo hogar
y en tu agradecida familia
siga reinando la felicidad
Pedir por todos esos seres
que perdieron sus caminos
queriendo hallar la verdad
en estratos de humo y vino
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